Amigos de la
Tierra Internacional documenta casos concretos del lobby corporativo en
Naciones Unidas
En la víspera de la
Cumbre de Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible que tendrá lugar del 20
al 22 de junio en Río de Janeiro [1], Amigos de la Tierra Internacional
presenta un nuevo informe donde denuncia la creciente influencia de las grandes
empresas y del lobby corporativo dentro de la ONU [2].
El informe, ’Liberemos a la ONU de la cooptación
empresarial’, expone varios casos que evidencian la influencia excesiva del
sector privado en las políticas y organismos de la ONU. Asimismo,
demuestra cómo los intereses empresariales están afectando a la capacidad de la ONU para encontrar y poner en marcha
soluciones a muchos de los problemas a los que nos enfrentamos, problemas
ambientales, sociales, alimentarios y económicos, causados en muchos casos por
las grandes empresas.
"Las
posiciones de los gobiernos están siendo controladas en mayor medida por los
intereses empresariales de la industria y los sectores comerciales más
contaminantes, que tienen como objetivo lucrarse con la crisis ambiental,
climática y financiera", afirmó Nnimmo Bassey, presidente de Amigos de la
Tierra Internacional.
Según el nuevo
estudio, las posiciones de los gobiernos estatales en las negociaciones
multilaterales, y en particular las de Río+20, están cada vez más condicionadas
por empresas privadas; los representantes de las agrupaciones corporativas dominan ciertos
espacios de discusión e incluso algunos organismos de la ONU; los
grupos empresariales desempeñan
un papel privilegiado de asesoramiento; los funcionarios de la ONU van y vienen del sector privado, y, por último, la
financiación de sus organismos depende cada vez más del sector empresarial.
A su vez, la
Federación denuncia que la ONU
y las grandes empresas han trabajado muy de cerca para desarrollar y promover
el concepto de “economía verde”, otro de los puntos principales del informe. En
este sentido, la “propuesta verde”, en lugar de buscar e implantar medidas eficaces que favorezcan
comportamientos sostenibles, es un mero tinte, que sigue perpetuando una
economía injusta, donde las personas y el medio ambiente no tienen cabida. Shell,
ExxonMobil, Monsanto o Basf, conocidas por malas prácticas ambientales y
sociales, son algunas de las empresas que participaron en la elaboración del
informe sobre economía verde.
Más de 372 organizaciones de la sociedad civil que representan a
millones de personas en todo el mundo han firmado una declaración - promovida por Amigos de la Tierra
Internacional y otras nueve organizaciones- para denunciar el control de las multinacionales en Naciones Unidas [3].
“Los intereses
empresariales están bloqueando la toma de decisiones de la ONU para solucionar
las principales causas de los problemas ambientales, sociales y económicos. La ONU y la Cumbre Río+20 deberían escuchar las
demandas de la Cumbre de los Pueblos en Río y aplicar medidas que responsabilicen a las
empresas de sus impactos dañinos", declaró Lucia Ortiz, Coordinadora del
Programa de Justicia Económica de Amigos de la Tierra Internacional.
“El gran número de
ejemplos del control que ejercen las grandes empresas en la ONU demuestran el
perjuicio al buen trabajo de muchos organismos y funcionarios para proteger y
devolver el poder a la gente. Permitir que esto suceda es poner en riesgo la
credibilidad y la integridad de la ONU y de sus Estados miembros. De hecho, se trata de una amenaza que podría socavar la
misión de todo el sistema de Naciones Unidas, por lo que debe detenerse", afirmó Paul de
Clerck, coordinador de la campaña sobre Corporaciones de Amigos de la Tierra
Internacional.
¿QUÉ MUESTRAN LOS ESTUDIOS DE CASOS?
- La iniciativa Energía Sostenible para Todos (SE4ALL) está siendo decidida por un grupo elegido a dedo, que no rinde cuentas a nadie. El grupo está bajo el control de representantes de multinacionales y bajo intereses vinculados a los combustibles fósiles, prácticamente sin participación ni consulta a la sociedad civil. Amigos de la Tierra Internacional considera que SE4ALL no logrará su objetivo declarado de duplicar la cantidad de energía renovable.
- El apoyo a las políticas agrarias y alimentarias parece estar condicionado por los vínculos empresariales en el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola de la ONU (IFAD). De esta forma, promueven tecnologías que ponen en peligro los derechos de los pueblos y el acceso a la alimentación.
- El Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB) está siendo promovido, cada vez más, por actores empresariales interesados en mercantilizar la naturaleza, en lugar de conservar la biodiversidad.
- El sector privado busca nuevas formas para tratar el agua como una mercancía, mientras privan a la gente de su derecho universal al agua y ponen en peligro el acceso a la misma y al saneamiento para millones de personas en toda La Tierra.
- El Pacto Mundial de la ONU permite a las empresas mejorar su imagen mediante la utilización de la bandera de Naciones Unidas, sin lograr comportamientos sostenibles en las empresas.
- La ONU ha trabajado junto a las grandes empresas en el desarrollo y la promoción del concepto de "economía verde" que vende a la naturaleza y a la gente, y que lava la imagen de un sistema económico deteriorado e injusto a expensas de un modelo viable social y medioambientalmente.
[1] El sitio web de
la Cumbre: http://www.uncsd2012.org
[2] El nuevo
informe está en línea para la prensa: EN ESPAÑOL: http://www.foei.org/reclaim-the-UN-report-es/view
[3] Más información
sobre la declaración y las organizaciones firmantes en: http://www.foei.org/end-un-corporate-capture
El 5 de junio de
2012, Amigos de la Tierra Internacional comenzó una campaña para exhortar a la
ONU a limitar la influencia excesiva de las empresas multinacionales en sus
procesos de toma de decisiones.
La campaña incluye
una petición pública en línea que solicita al Secretario General de la ONU, Ban
Ki-moon, que tome las medidas necesarias para liberar a la ONU de la influencia
empresarial.